Encuentros con Oriol
y
la grasa de bellota.
Sucedió en SDS WINE BOUTIQUE
la empresa de Oriol Serra
En Costa del Este.
El sábado 16 julio 2011.
Sólo un gran profesional en las artes y en las ciencias del buen vino y de la buena cocina, como nuestro querido amigo Oriol Serra Nadal, posee la ingeniosidad y el talento para mantener una constante y sistemática vocación a favor de la información, del mercadeo y de la enseñanza referente a los temas eno gastronómicos que él domina ejemplarmente aquí en Panamá con la elevada distinción, calidad y erudición que él tiene y que sabe ofrecer de manera clara y emocionante a quienes, como yo, tenemos el privilegio de frecuentarlo. El sábado 16 de julio 2011 llegamos a SDS WINE BOUTIQUE, su negocio en Costa del Este, y participamos en una inolvidable experiencia de cata y degustación de gran clase como nunca lo hubiese imaginado. Por la calidad personal y empresarial de los asistentes, por la amenidad y el rico contenido de las explicaciones de Oriol, por la secuencia y escalada de jamones y chorizos de fina calidad presentados por La Casa del Jamón de Gago quien también distribuye unas inmensas y sabrosas aceitunas que degustamos por decenas y sin interrupción, por las cautivantes almendras tostadas preparadas por Oriol, las cuales son una marca insignia en cada uno de sus eventos, por el aceite de oliva Oleum Priorat Elixir, Denominación de Origen Protegida Siurana, digna de reyes, producto de encumbrada nobleza que por sus bondades catalanas pudo impulsar nuestras licencias poéticas para hacer en esta ocasión con el pan y las olivas apretados entre los dedos de nuestras propias manos, la famosa “scarpetta alla italiana”, por Maria Fernanda, quien mostrando sincera gentileza ni por un segundo dejó reposar nuestras copas de cristal para mantenerlas siempre colmadas de vino y quien fue también generosa en el ofrecimiento del Elixir siuriano, y, por último, por una escalada hipnótica de vinos en perfectas armonías con los ibéricos, fuesen chorizos que jamones, de bellotas o recebo. Y el gran final, un grandioso do de pecho como para derribar la Arena de Verona, que fue tan sublime que omito todo el detallado recorrido preparatorio de vinos, chorizos y jamones que nos llevó a este gran final, nada menos que un sublime Jamón de Bellota Guijuelo Don Saturnino acompañado por un imponente RODA RESERVA 2006. Maridaje impecable que merece toda la intensidad sensual de aquella frase típica del mejor romanticismo italiano y que lo dice todo: “¡Ver Nápoli y después morir!” Debo terminar haciendo un breve recuento de algunos contenidos revelados por Oriol y que no son muy conocidos y que el amigo Oriol tuvo la generosidad de regalarnos. En primer lugar hay que recordar que lo que indica la mejor calidad de la raza del cerdo es la denominación Ibérico y no la de Pata Negra ya que esta última no es una denominación. Porque un gran jamón de bellota puede obtenerse también de un cerdo ibérico de pata blanca. Y cuando se habla de jamón serrano se está refiriendo nada más que a una manera de cortar el jamón en forma de V, es decir, en sentido diagonal con relación a la longitud de las fibras. Otra verdad oculta o desconocida es que la grasa del cerdo alimentado durante la montanera con bellotas y pastos naturales muy especiales, está libre de esas grasas letales que aumentan el colesterol malo. Por lo que más bien este tipo de grasa vegetal de la bellota, contenido en el marmoleado del jamón de bellota, tiene propiedades que favorece el colesterol bueno. Y muchas otras verdades y datos que guarda Oriol en sus memorias de vida y que valdría la pena oír otra vez…por cierto, una y otra vez… en el mismo sitio, con misma gente, con las mismas cosas y con el mismo espíritu desenfrenado que se agitó entre nosotros en esta ocasión y que no era otra cosa que un irresistible mandato soberano emitido por la gloria celestial…
Saludos.
Flavio.
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